En la oficina el día trascurre con la placidez de siempre; los empleados trabajan o fingen que trabajan, esperando que el reloj marque las seis. Raúl atiende sus tareas, pero desde el medio día no se le ve tranquilo. Marca una y otra vez su teléfono celular y espera ansioso que Eva le conteste. Pero una grabación le contesta: el número que usted marco se encuentra temporalmente fuera de servicio. Incapaz de concentrarse, Raúl deja su escritorio y camina por entre los cubículos, pensando obsesivamente en lo que estará haciendo Eva. Durante la hora del almuerzo se la pasa marcando el teléfono una y otra vez; por el radio se entera de la falla general de los servicios de telefonía celular en gran parte de la ciudad, lo que no lo tranquiliza en absoluto; piensa que esta es la oportunidad para que Eva haga algo. El mismo se pregunta ¿Qué puede ella hacer? Teme responderse. Decide no regresar al trabajo; sale a la calle a enfrentar un viernes de quincena y una ciudad desqui...
Un dia decidi escribir; tome una libreta y un lapiz. Otro dia me comprometi a ser escritor; compre una maquina de escribir. Despues me di cuenta que no podia seguir escribiendo en papel; me consegui una computadora. Ahora, no lo se; quiero mostrar lo que he hecho y lo que habre de hacer.